Emprendedores y fundadores de startups a menudo enfrentan un nivel extremo de estrés y presión en su día a día.
La gestión de un negocio nuevo o en crecimiento, la toma de decisiones constantes, las presentaciones de negocio y la responsabilidad de liderar un equipo pueden llevarlos al agotamiento y afectar su bienestar emocional y físico.
El estrés crónico puede resultar en insomnio, agotamiento, falta de concentración y una disminución en la toma de decisiones efectivas.
Aquí es donde el mindfulness entra en juego pues ofrece herramientas y técnicas que ayudan a los emprendedores a reducir el estrés, mejorar la concentración y tomar decisiones más intuitivas, creativas y claras.